domingo, 16 de noviembre de 2014

POEMA XXV- ENTRE MIS BRAZOS. AKASHA VALENTINE. ED. REEDITADA.



POEMA XXV- ENTRE MIS BRAZOS. AKASHA VALENTINE. ED. REEDITADA. 

Duerme el tiempo entre mis manos, y los recuerdos que creía olvidados en algún lugar de mi pasado han regresado a mi lado. Y llenan de pesadumbre mi alma, doblegando mi voluntad a su antojo, curvando así mis brazos y mi torso, mi piernas y mis dedos, obligándome a adquirir una posición sumisa ante el dolor. Evoco recuerdos en mi exhausta mente, y traigo a mi memoria tu nostálgica y angelical cara, plasmada en la melancolía, con la mirada extraviada, sin tener un punto fijo al que anclarse, porque por aquel entonces no deseabas mirarme. Rescato, sin yo quererlo, las palabras que en su momento no pude decirte y que ahora sin previo aviso son capaces de asomarse al borde de mis labios con el único fin de ser pronunciadas una y otra vez sin cesar, con perseverancia, anhelando ser oídas por tus oídos y compensadas por los besos de tu boca.


Ansío lo que no tengo, lo que tuve y ya no sostengo, extraño pues el tacto de nuestros dedos, que nunca estuvieron del todo cómodos con la posición de nuestras manos, pues si yo tiraba de ellos tú los empujabas hacia abajo, y si yo me negaba a cogerlos tú tirabas de éstos, y así nunca estuvimos del todo satisfechos, como si nuestras manos y dedos no encajasen a la perfección. Sabe pues mi derrota a resignación, y ante este lúgubre pensamiento he de rendirme, hastiada por los remordimientos, por el silencio que me ahoga tapándome con sus manos para que ya no diga nada, llenado mi estómago de voraces sensaciones que me agotan y me rompen. Aun siendo consciente de que te amo más que a la vida misma, lo único que me queda ya por hacer es encerrar a mis emociones en una caja con mil candados y arrojar las mil llaves a las profundidades de los océanos.



Y aun así, aun siendo consciente de que estas palabras no serán el fruto de mi salvación, ni los actos mi bote salvavidas, es mejor que nada, saber que nunca podré volver a tenerte entre mis brazos hace que me reconforten esta clase de pensamientos. Vete pues, ya nada nos queda salvo un puñado de sentimientos vacíos e inexpresivos, un sin fin de palabras sin significado y una caja llena de fotografías cuyos recuerdos ya no nos pertenecen. Todo se ha ido, ya nada queda, incluso el sabor de tus labios se ha esfumando poco a poco de mi boca sin que yo pudiera hacer nada por evitarlo. Lo, ves, nada resiste ya salvo lo que ves, y aún así de manera fatigosa yacemos moribundos en este sueño al que llamamos anhelo, intentando dar sentido a lo que tiempo atrás conocimos.

Akasha Valentine 2014 © http://www.akashavalentine.com

NOTA LEGAL: Akasha Valentine 2011- 2014 ©. La autora es propietaria de esta obra y tiene todos los derechos reservados. Si ves algún poema en otra web, foro u otro medio, están cometiendo un delito, salvo que cuenten con el permiso expreso de la autora, y siempre que esté citada la fuente y la autoría.      

viernes, 14 de noviembre de 2014

POEMA XXIV- VIVIENDO EN TU CORAZÓN. AKASHA VALENTINE. ED. REEDITADA.


POEMA XXIV- VIVIENDO EN TU CORAZÓN. AKASHA VALENTINE. ED. REEDITADA. 

Con la mente ocupada en tus pensamientos y la cabeza cabizbaja sigues rememorando mis palabras, ¿verdad? Aquellas para las que el tiempo no tiene una época ni un periodo determinado de duración, pues apremio a la impaciencia de tus labios para que me digan lo que nunca llegaste a manifestar como una verdad absoluta de tus emociones. Ansioso se vuelve mi deseo, arrogante la ausencia y dolorosa la sensación de no tener la calidez de las palmas de tus manos sobre mis desnudos senos. Aun sintiendo que la piel se me hiela, mantengo viva la esperanza, y ardiente al deseo, que mullido sobre un diván antiguo se pregunta a dónde fueron esos besos que hasta hace solo unos meses no cesaban de llenar mi cuerpo y calmar ese estado de ansiedad que se quedaba tras tus repentinas partidas. Si hubiese sabido en aquel entonces lo que sé ahora, tal vez, y sólo digo dicha palabra por miedo a hacerla cumplir como una sentencia, no me hubiera creído nada de lo que me decías, porque me repetías tantas veces que me amabas, que a las oscuras sombras arrojé a la verdad para rendirme y dejarme llevar por unos momentos en los que el placer de tu cuerpo me aliviaba más que la sensación de pensar que tus labios ya tenían otra boca por la que se desesperaban.


Por aquel entonces me alimentaba de sueños hechos migas, y me dejé arrastrar por esta insignificante ilusión, creyendo que este deseo nunca sería mancillado por las mentiras de tus labios, y así, sin saberlo, fuimos tejiendo un mundo imperfecto donde caminábamos sin descanso de un lado para otro con los ojos vendados sobre delgadas cuerdas flojas que nos hacían tambalear la mitad del tiempo. Me rendí ante una realidad alimentada por el engaño, y aunque yo quise abrir los ojos en tantas ocasiones, nublaba a mi mente pensando en la imposibilidad de ser feliz si a tu lado yo no estaba. Para mí tu amor siempre fue como un rompecabezas donde todas las piezas me parecían iguales pero ninguna encajaba de la misma manera, y creyendo que el error estaba en la manera en la que ejecutaba el juego, dejé de creer que los corazones son fragmentos perfectos que unen a dos almas que se aman. Tantas veces grité tu nombre a la soledad de la noche que incluso para no sentirme tan sola ya besaba con fervor y rozando la delgada línea que separa la cordura de la locura esos marcos vacíos donde antes estuvo tu congelado rostro en fotografías ahora hechas pedazos en las papeleras de las calles.



Qué nos queda ya si todo cuanto queríamos nunca se hará realidad. Y aun así sigo viviendo con tu recuerdo en mi mente, con ese dolor permanente que sin llegar a cicatrizar sigue esperando ser sanado por la misma persona que me infringió el daño. Tú y tus engaños, tus falsas palabras, fuisteis los que siempre nos mantuvieron separados, y aún así quiero volver al ayer, porque en ese periodo de falsas creaciones eras en parte mío. Nuestras vidas nunca volverán a ser igual, hemos estado demasiadas veces en el purgatorio como para creer que al final alcanzaremos ese anhelado cielo por el que los vivos sienten verdadera debilidad. Llora pues mi muerte en el momento, pues yo ya no tengo más lágrimas para verter, pues por ti las derramé todas aquel día, en ese mes, de cuyo año me he deshecho, y para el que ya no tengo más memoria que la tiene el olvido. Me hubiera gustado creer que yo era la más importante para ti, pero la debilidad de tu amor y las heridas de mi alma sólo hicieron añicos este sueño que nunca podré olvidar y al que jamás podré volver a regresar porque ya forma parte del ayer.

Akasha Valentine 2014 © http://www.akashavalentine.com

NOTA LEGAL: Akasha Valentine 2011- 2014 ©. La autora es propietaria de esta obra y tiene todos los derechos reservados. Si ves algún poema en otra web, foro u otro medio, están cometiendo un delito, salvo que cuenten con el permiso expreso de la autora, y siempre que esté citada la fuente y la autoría.       

sábado, 8 de noviembre de 2014

POEMA XXIII- VATICINANDO TU DESTINO. AKASHA VALENTINE. ED. REEDITADA.


POEMA XXIII- VATICINANDO TU DESTINO. AKASHA VALENTINE. ED. REEDITADA. 

Siempre me he preguntado por qué los copos de nieve no se dejan atrapar. Ya sea bajo una noche fría o al comienzo de una mañana tibia, con la mano cubierta por un guante, o con la piel desnuda, no se dejan retener. Es duro, porque ya no puedo volver al ayer para caminar sujeta por la firmeza de tu mano, con tus dedos enredados en los míos, con nuestras ropas siendo mecidas por el gélido viento y nuestros labios agrietados lamiéndose mutuamente las heridas que la fría estación del invierno deja tras su paso. No se puede vivir de los recuerdos que viven en las fotografías o en las portadas de las revistas que un día ocupamos, y tampoco puedo pedirte que vuelvas de ese lugar al que te has ido para no volver jamás. Muerdo con desazón mi lengua, malditas sean las palabras que un día arroje con arrogancia y vertí con malicia sin darme cuenta de que en el fondo lo único que lograba con ellas era hacerte más daño.


Si pudiera volver atrás en el tiempo me golpearía y una y mil veces en la cara para hacerme entrar en razón y así dar lo mejor de mí cuando estabas a mi lado y no ahora cuando te has ido de mi vida sin dejar ni rastro. Dime cómo se puede se puede volver a vivir una vida desde el principio si tú ya no estás en ella para dar pie al inicio. Me atosigan los pensamientos, y no quiero creer que la verdad que me muestran mis ojos es la realidad a la que debo de enfrentarme cada día. Si tu voz volviera a ser oída estoy segura de que mi pena se esfumaría, pues en este sueño que vivo todos los días tu cuerpo se pudre en un lecho frío cubierto por la tierra que piso y tu tumba decorada de flores marchitas manifiesta una realidad a la que no quiero ser enviada cada segundo de mi angustiosa existencia.


Amor, mi amor, vuelve a mí, no te quedes al otro lado de la orilla, donde mis brazos se fatigan si nado, donde mis dedos no llegan si los estiro para tocarte. Mi vida, nunca quise ser ese pesar que sobre tus hombres hice cargar en reiteradas ocasiones. Yo solo quería ser mejor que tú, para tener mi conciencia tranquila, para sentir que mis sueños ya se habían cumplido y nada más sería una distracción en mi camino, salvo tú, mi eterna y delirante obsesión. ¡Ay de mí! Esos ojos en los que tantas veces me vi ya no están aquí para volver a mirarme en ellos, y las risas ya resuenan como antes, ni los atardeceres tienen el peso de antes. Sólo quedan letras en papeles borrosos en los que tus trazos han quedado olvidados por mis ojos. Todo cuanto viví a tu lado sigue siendo como un sueño, una emoción con la que cada día me visto como si fuera mi traje de los domingos. Y siempre con una copa en la mano por mi corazón rebosado está de nostalgia, y las penas no se ahogan solas si el alcohol que ingiero no las ayuda. Ahora que el silencio me acompaña creo que dormiré un poco más para olvidarme de la cruda realidad.

Akasha Valentine 2014 © http://www.akashavalentine.com

NOTA LEGAL: Akasha Valentine 2011- 2014 ©. La autora es propietaria de esta obra y tiene todos los derechos reservados. Si ves algún poema en otra web, foro u otro medio, están cometiendo un delito, salvo que cuenten con el permiso expreso de la autora, y siempre que esté citada la fuente y la autoría.